barrera alérgicaPrevención del virus del Zika y diferencias en picaduras entre avispa y abeja

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Medidas a tomar en caso de una picadura de abeja o avispa

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Avispa o abeja

Las avispas tienen un tamaño promedio de 1,5 centímetros. Son fácilmente reconocibles por su coloración amarilla y negra, así como su apariencia brillante y lisa. Además, se caracterizan por su extremo puntiagudo y su cintura estrecha. Son depredadoras, se alimentan de carne.

Por otro lado, las abejas tienen una longitud que oscila entre 1 y 2 centímetros. A diferencia de las avispas, su tonalidad es una mezcla de pardos y amarillos, y su cuerpo es peludo y más robusto. Estos insectos se alimentan del néctar y polen recolectado de las flores, y también utilizan estos ingredientes para producir miel.

También hay una variación en las picaduras de estas dos especies. Mientras que las avispas también pueden morder, su aguijón es liso y les permite picar ilimitadamente. En cambio, el aguijón de las abejas es dentado y se queda incrustado en la piel de las personas al picar, lo que les provoca la muerte poco después.

Qué no hacer

Es importante tomar precauciones al extraer el aguijón de una picadura. Evita utilizar pinzas u otros utensilios para retirarlo, ya que el veneno se concentra en la punta y podría expandirse aún más en tu cuerpo.

Aunque sea tentador, no te rasques la picadura, ya que podrías empeorar la situación. Al rascarte, el veneno podría esparcirse por otras áreas del cuerpo y causar una reacción alérgica más grave.

No es recomendable aplicar remedios caseros como miel, saliva, patata o barro sobre la picadura. Estos pueden tener efectos contraproducentes y hacer que la situación empeore. Es mejor acudir a un profesional de la salud para recibir el tratamiento adecuado.

Ante una picadura, es importante no auto medicarse con cualquier tipo de remedio o medicamento. Consulta siempre a un médico antes de tomar cualquier decisión. Además, el automedicarte podría complicar el diagnóstico y el tratamiento adecuado.

El poder de una buena nutrición

La reconocida doctora Pilar Cots Marfil, especialista en alergología del conocido Complejo Hospitalario Ruber Juan Bravo, comparte con nosotros su conocimiento sobre las abejas y avispas.

Según la especialista, a pesar de que estas dos especies pertenecen al mismo grupo de los himenópteros, existen similitudes y una diferencia fundamental que determina su comportamiento. Mientras que las abejas se alimentan de néctar y polen recolectado de las flores, su cuerpo está cubierto de pelillos que facilitan esta tarea. Por otro lado, las avispas son carnívoras. Esta característica explica por qué son atraídas hacia comida en la mesa.

¿Quién no ha experimentado en algún momento la incomodidad de recibir la visita de una avispa mientras comemos? Esta situación puede ser bastante molesta e incluso peligrosa para quienes tienen alergia a las picaduras de estos insectos. Por ello, es importante conocer sus diferencias y tomar precauciones al estar cerca de ellas.

Cómo evitar las picaduras

La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic) brinda recomendaciones para prevenir los picotazos de abejas y avispas. Es importante tener presente que estos insectos pican únicamente para defenderse y proteger sus nidos o colmenas.

Consejos para evitar las picaduras de abejas y avispas:

- Evitar revolotear o molestar a los himenópteros.

- No utilizar perfumes o colonias con fuertes fragancias al estar en zonas con presencia de estos insectos.

- Cubrir los alimentos y bebidas al aire libre para evitar que atraigan a las abejas y avispas.

- No caminar descalzo por el césped o jardines.

- Revisar cuidadosamente las zonas antes de sentarse al aire libre.

- Mantener las basuras y desechos correctamente cerrados.

- Utilizar repelentes de insectos y ropa adecuada al realizar actividades en la naturaleza.

En caso de ser atacado por abejas o avispas, es importante seguir estas indicaciones:

- Alejarse rápidamente del lugar donde se encuentran los insectos.

- No golpear ni intentar espantar a las abejas o avispas.

- Retirar el aguijón, si es que fue clavado, con una uña o una tarjeta plástica lo antes posible.

- Lavar la zona afectada con agua y jabón y aplicar hielo para reducir la inflamación.

- En caso de tener una reacción alérgica grave, llamar a servicios de emergencia o acudir a un centro médico de inmediato.

Recuerda ser respetuoso con estos insectos ya que solo te atacarán si se sienten amenazados. En caso de ser picado, no entres en pánico y sigue las indicaciones para evitar una reacción alérgica grave. Tu bienestar es nuestra prioridad.

Cómo distinguir entre una mordedura común y una respuesta alergénica

Si te pica una abeja o una avispa, notarás una herida en la zona afectada, con enrojecimiento y hinchazón de varios centímetros. Además, experimentarás un dolor intenso y una sensación de picor. Si aparecen estos síntomas, es posible que estés sufriendo una reacción alérgica grave y es importante que busques ayuda médica de inmediato.

Puedes dirigirte al servicio de urgencias más cercano o llamar al número de emergencias 112. En caso de una reacción alérgica grave, es fundamental que recibas atención médica cuanto antes para evitar complicaciones.

Además del enrojecimiento y la inflamación, hay otros síntomas que pueden indicar una reacción alérgica grave. Si, además de los ya mencionados, sientes mareos, dificultad para respirar, hinchazón en la cara o dificultad para tragar, es importante que acudas a un profesional médico de manera inmediata.

Recuerda que las reacciones alérgicas pueden ser peligrosas y requerir atención urgente. Si alguna vez sospechas que puedes estar sufriendo una reacción alérgica a una picadura de abeja o avispa, no dudes en buscar ayuda médica sin demora. Es mejor prevenir cualquier complicación que pueda surgir.

Medidas de seguridad para individuos con alergias

Las personas que han sufrido una reacción grave deben acudir al alergólogo para confirmar si son alérgicas al veneno de himenópteros. Según Matheu, aquellos que ya cuentan con un diagnóstico confirmado, deberían evitar los lugares que tengan presencia de estos insectos. Además, en caso de salir al campo, es recomendable llevar siempre un antihistamínico y una inyección de autoadministración de adrenalina.

Este experto señala que las personas que han experimentado una reacción alérgica grave tienen un alto riesgo de sufrir nuevamente una reacción sistémica en caso de una nueva picadura. Por lo tanto, se les aconseja iniciar un tratamiento de inmunoterapia específica.

Esta terapia consiste en la inyección progresiva del veneno del himenóptero causante de la alergia, con una efectividad comprobada superior al 95%. Este enfoque terapéutico proporciona una protección significativa para aquellos que son alérgicos a las picaduras de estos insectos.

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