grados de inclinación de la torre de pisa

Explorando la inclinación de la torre de Pisa misterios y relatos

La famosa Torre de Pisa, también conocida como torre inclinada de Pisa, es el campanario de la catedral de Pisa ubicada en la plaza del Duomo de la ciudad del mismo nombre. Se encuentra en la región italiana de la Toscana y es la capital de la provincia homónima de Italia. Originalmente, la torre tenía una altura de 60 m, pero ahora mide 56.67 m desde la base del lado más alto y 55.86 m desde la base del lado más bajo. Se estima que pesa aproximadamente 14,500 toneladas y tiene una inclinación de alrededor de 4 grados con una desviación de 3.9 m de la vertical. Con ocho niveles en total, presenta una base con arcos ciegos que incluye 15 columnas, seis niveles decorados con arcadas abiertas en forma de medio punto y un campanario en la cima. Los 251 escalones en espiral que componen su escalera interna son un atractivo turístico. La Torre de Pisa, junto con la catedral a la que pertenece, se considera una de las maravillas del arte románico.

El progresivamente menos inestable campanario de pisa

En el futuro, es posible que la famosa foto "sujetando" la torre inclinada de Pisa deje de ser tan popular: el emblemático monumento italiano se está enderezando "peligrosamente", al menos para las divertidas imágenes de los turistas. Así lo señala el reciente informe anual del grupo encargado de monitorear la construcción, el cual afirma que la torre ha perdido 2,5 centímetros de su icónica inclinación en los últimos 12 años.

Este cambio, aunque imperceptible a simple vista, es una muestra de los esfuerzos realizados para evitar que la torre continúe inclinándose cada vez más y pueda colapsar en el futuro.

Los expertos de la Universidad de Pisa, encargados de la supervisión y restauración de la torre, aseguran que desde 2001 han logrado reducir la inclinación en un total de 31 centímetros. Este progreso se debe principalmente a la eliminación de escombros del suelo y al uso de cables para sujetar la estructura.

Sin embargo, aún queda un largo camino por recorrer antes de que la torre recupere su posición original. Aunque se espera que siga enderezándose lentamente en los próximos años, los expertos aseguran que esto garantizará su estabilidad y seguridad a largo plazo.

Es importante recordar que la torre de Pisa no solo es un lugar turístico popular, sino también es considerada un símbolo de la arquitectura y la ingeniería italiana. Por ello, es necesario tomar medidas para preservarla y mantenerla en pie durante muchos años más.

Así que, si planeas visitar la famosa torre en un futuro, prepárate para una foto diferente: una torre cada vez más recta pero protegida de posibles daños.

Campanaseditar

Antiguamente, cada una de las campanas tenía una dedicación específica para cada momento del día litúrgico. Por ejemplo, la Pasquereccia era tocada para celebrar la Pascua, mientras que la Terza sonaba a la tercera hora del día (nueve de la mañana) y la campana Vespruccio lo hacía a la hora de las vísperas (seis de la tarde).

Se tienen registros de una campana proveniente de la iglesia de San Michele en Guamo, cerca de Lucca, que fue refundida para formar parte de un "nuevo concierto"[24]​[25]​.

La campana de San Ranieri, originalmente llamada "Justicia", se encontraba en el palacio del mismo nombre. Era utilizada para señalar la muerte de los traidores y según la leyenda, también tocó para el fallecimiento del Conde Ugolino. En el siglo XV fue llevada a la torre del campanario para reemplazar a la Pasquareccia original, pero posteriormente fue refundida en 1606.

La intrigante crónica del Sumo Pontífice que se enfrentó a los felinos

"¡ATENCIÓN! No es de extrañar que algunos gatos sean idolatrados hoy en día y sean merecedores de amor y cuidado que despiertan envidia incluso en humanos. Si alguien del pasado apareciera entre nosotros, seguramente quedaría perplejo y asombrado. ¿Cómo es posible que esos animales a los que se les atribuía mala suerte, ahora sean consentidos y adorados? Una antigua superstición, muy difundida, consideraba a los gatos negros portadores de desgracia. Sin embargo, durante la Edad Media, los felinos eran vistos como seres diabólicos y eran perseguidos sin piedad. Incluso el Papa Gregorio IX declaró una guerra en su contra por ser considerados malignos."

Historiaeditar

La construcción de la icónica torre de Pisa se llevó a cabo en tres fases a lo largo de un periodo de casi dos siglos. La construcción del primer nivel empezó el 9 de agosto de 1173, en una época de triunfos militares y prosperidad. Esta primera planta está rodeada de semicolumnas y arcos ciegos, elaborados en mármol de un blanco resplandeciente.

Durante mucho tiempo se le atribuyó el diseño de la torre a Guglielmo, un artista que vivió en Pisa en el siglo XII y que era conocido por su habilidad en la fundición de bronce, especialmente en la catedral de la ciudad. Sin embargo, recientes investigaciones han determinado que el verdadero autor de la obra fue Bonanno Pisano, quien dejó Pisa en 1185 para trasladarse a Monreale, Sicilia. Su sarcófago fue descubierto en la base de la torre en 1820.

En 1178, después de la construcción del tercer nivel, la torre empezó a inclinarse gradualmente hacia el norte, aproximadamente tres metros. Esto se debió a unos cimientos débiles y a la inestabilidad del terreno. Desde sus inicios, el diseño de la torre era imperfecto, pero los conflictos entre los pisanos y los Estados vecinos provocaron una interrupción en su construcción durante un siglo. Este periodo de tiempo permitió que el suelo se asentara, evitando el colapso de la famosa torre.

Construccióneditar

La monumental torre inclinada de Pisa es uno de los símbolos más emblemáticos de Italia. Sin embargo, su construcción fue una odisea que se prolongó durante casi dos siglos y se llevó a cabo en tres etapas distintas.

El primer registro de la construcción de la torre data del 5 de enero de 1172, cuando Donna Berta di Bernardo, viuda residente en la casa dell'Opera di Santa Maria, donó sesenta soldi a la Opera Campanilis petrarum Sancte Marie para adquirir piedras para la base del campanario. Luego, el 9 de agosto de 1173, se colocaron los cimientos de la torre y se iniciaron los trabajos en la planta baja de mármol blanco. Sin embargo, esta fase se vio interrumpida por un suceso inesperado...

Un comienzo problemático

Después de haber avanzado hasta el segundo piso en 1178, la torre comenzó a hundirse debido a una cimentación de apenas tres metros, asentada sobre un subsuelo débil e inestable y un diseño defectuoso. Este contratiempo detuvo la construcción durante casi un siglo, mientras la República de Pisa se veía inmersa en constantes batallas contra sus vecinos de Génova, Lucca y Florencia. Este largo período de pausa permitió que el suelo se estabilizara, evitando así un posible desastre...

Un nuevo comienzo

Finalmente, en 1260 se seleccionó a Guido Speziale, hijo de Giovanni Pisano, para supervisar la construcción de la torre. Cuatro años después, el 12 de abril de 1264, el maestro de obras Giovanni di Simone y un equipo de 23 trabajadores fueron enviados a las montañas cercanas a Pisa para extraer el mármol necesario. Gracias a sus esfuerzos, la construcción se reanudó en 1272, con una nueva estrategia para evitar que colapsara: los ingenieros decidieron construir pisos superiores con un lado más alto que el otro para compensar la inclinación.

Incluso después de esta innovadora técnica, la torre siguió inclinándose cada vez más, pero los constructores persistieron en su tarea hasta su finalización en 1319. Desde entonces, la Torre de Pisa ha sido un testimonio de la pasión, perseverancia y habilidad creativa de sus constructores, convirtiéndose en uno de los monumentos más visitados y admirados del mundo.

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